Hoy por hoy, el mercado laboral no es capaz de satisfacer la demanda de profesionales del sector de la tecnología, algo que ya han demostrado algunas consultoras estratégicas, como McKinsey & Company.

Como consecuencia, existe un déficit de profesionales para ocupar determinados puestos de trabajo para los que se necesita que las personas cuenten con habilidades tecnológicas especializadas. Y aquí es donde entran el upskilling y el reskilling , cada vez más relevantes y ventajas en potencia.

¿Qué es Upskilling?

El término upskilling hace referencia al desarrollo de habilidades, conocimientos y competencias que un profesional ya posee, principalmente en los ámbitos en los que ya trabaja. Se basa en aumentar nuestros conocimientos sobre determinados asuntos, ya sea a través de la ampliación o de la actualización de los mismos.  

¿Qué es el Reskilling?

El reskilling, por su parte, tiene por objeto una recualificación, ya sea para ocupar un nuevo cargo o para actualizar el currículum y cobrar mayor relevancia en el mercado de trabajo. Así pues, el reskilling consiste en adquirir nuevas habilidades y competencias, permitiendo que los profesionales transiten entre diferentes sectores para satisfacer las necesidades emergentes, lo cual crea diferentes oportunidades laborales.

El reskilling también pone de manifiesto otra tendencia: la reubicación de profesionales dentro de las empresas. Según un estudio de 2021 realizado por LinkedIn, por regla general los colaboradores de las empresas que más promueven la movilidad interna permanecen el doble de tiempo.

¿Cómo pueden Upskilling y Reskilling ayudarte en tu carrera?

Un importante informe denominado The Future of Jobs, de 2020, elaborado por el Foro Económico Mundial, señaló la existencia de una tendencia de cambio de rumbo profesional por medio de estrategias como el reskilling y el upskilling.

Dicho informe reveló que solamente el 25 % de las demandas de aprendizaje de las empresas puede suplirse internamente, lo cual resulta interesante. Quiere decir que apenas el 25 % de las tareas que deben aprenderse o de las aptitudes de han de adquirirse pueden ser introducidas en el ambiente de trabajo; los colaboradores tienen que buscar el 75 % restante fuera del ambiente de trabajo o las empresas acabarán sustituyéndolos por otros profesionales que ya dispongan del conocimiento necesario.

El mismo informe menciona que, si una empresa aumenta la productividad del proceso educativo entre un 15 % y un 20 %, duplicará la cantidad de cargos que pueden ocuparse mediante reubicación interna en lugar de contratando a nuevos profesionales externos.

En un mercado como el de la tecnología, que sufre tanto con la falta de profesionales cualificados y con experiencia, el upskilling y el reskilling son estrategias que harán que tu currículum sea más competitivo. Por otra parte, al invertir para que un colaborador acelere su formación en determinada competencia, las empresas se benefician del compromiso del mismo, logrando además cubrir un puesto antes vacante y de difícil sustitución en el mercado de trabajo.

¿Por dónde empiezo?

Primero debes saber qué necesitas: un upskilling o un reskilling, es decir, si tu objetivo es permanecer en el mismo sector (en cuyo caso sería un upskilling) o si prefieres migrar hacia otra área (reskilling).

 Una vez tengas eso definido, es importante buscar una solución que se ajuste a tu agenda y a tu presupuesto. Un curso en línea puede satisfacer tus necesidades, depende de lo que estés buscando. Si todavía no tienes nada en mente, aquí te dejemos algunas sugerencias clasificadas por hard skills y soft skills: 

Hard skills (competencias técnicas)

Aquí encontrarás algunos ejemplos de las hard skills mejor valoradas en tecnología según LinkedIn:

• Sistemas operativos
• Scrum
• Git
• JavaScript
• SQL
• Node.js
• TypeScript

Soft skills (habilidades sociales que influyen en nuestra forma de trabajar y de relacionarnos con otras personas)

El Future of Jobs Report 2020 expuso las 11 habilidades interpersonales más importantes para el futuro:

1. Resolución de problemas complejos
2. Pensamiento crítico
3. Creatividad
4. Administración de personal
5. Liderazgo e influencia social
6. Pensamiento analítico e innovación
7. Resiliencia, tolerancia y flexibilidad
8. Inteligencia emocional
9. Persuasión y negociación
10. Gestión del tiempo
11. Aprendizaje activo

Por lo general, las hard skills pueden ser relativamente más fáciles de conquistar y adquirir, ya que, con tiempo y dedicación, los profesionales son capaces de estudiar y practicar a fin de perfeccionar habilidades técnicas. En cambio, las soft skills se consiguen de maneras diferentes. Dado que son habilidades más subjetivas, puede exigir un proceso interno de autoconocimiento e inteligencia emocional.

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